"Con el tiempo he aprendido a disfrutar más la vida. Con una autoestima saludable, porque nunca he basado mi percepción de mí misma en lo físico. Navego en la dimensión de los pensamientos, no de los espejos, y eso me da seguridad”.mc
Belleza a toda costa
En los últimos años se ha desatado una carrera loca y sin dirección por conseguir la belleza física y la eterna juventud a como dé lugar. La talla 2 y 4 es la obsesión de la mujeres y no tener barriga el propósito de los hombres; a tal punto de que muchos se someten a cirugías extremas, sin ninguna necesidad, pues algunas mujeres conseguirían bajar de peso con un poco de esfuerzo, sin tener que poner en riesgo sus vidas, ni pasar por el difícil proceso y los traumas sicológicos del período post operatorio; pero acaso eso dará la felicidad o la estabilidad que necesita cada ser humano?. Acaso esto mejorará nuestra capacidad de pensar o de mejorar nuestra calidad humana?. Definitivamente no, si no trabajamos nuestras capacidades internas, de nada nos valdrá una figura de infarto o un cuerpo de 15 años y la cara de 50; si no tenemos un auto estima elevada, de nada nos valdrá tanto sacrificio y si no cultivamos nuestro intelecto, no lograremos la atención, ni la permanencia.
Positividad es lo primero
Lo primero que debemos hacer para cambiar el curso de nuestras vidas es identificar nuestras metas y prioridades, cambiar nuestra actitud, recibir las noticias negativas con serenidad, asumir con paciencia las decepciones, enfrentar los problemas con determinación, concentrarnos en lo positivo y aplicar la plegaria de la serenidad ”cambiar las cosas que puedes cambiar, aceptar as que no puedes y tener sabiduría para ver la diferencia.
Lo que a ti te hace feliz, quizás a mi no
Es urgente que aprendamos a individualizar las situaciones y preferencias, porque el concepto de felicidad es muy diferente entre una persona y otra; aunque hay cosas y sensaciones que pueden ser comunes, los gozos de unos, pueden ser las pesadillas de otros. Mientras para unas personas lanzarse de un paracaídas les provoca una sensación maravillosa, que les sube la adrenalina a mil, a otros nos causaría un pánico indescriptible por vernos expuestos a un gran riesgo. Mientras unos se sienten bien llevando una vida tranquila y metódica. Otros se aburrirían de aburrimiento. La felicidad depende más de lo que ocurre dentro que de lo que sucede afuera; por eso es importante que nos ocupemos de nuestra casa interior.
Ligeros de equipaje, pero llenos de riqueza interior
Dejemos anidar en nuestro interior sentimientos nobles. Aprendamos a perdonar y a ser tolerantes, pero sobre todo, no nos olvidemos de que a pesar de que parezca que tenemos el mundo en nuestras manos, siempre puede haber un margen de error, por lo que no debemos permitir que la humildad se aleje. Es obligatorio pensar que ser humilde no es pensar menos de ti mismo, sino pensar menos en ti mismo.
Ser feliz….
Es la alegría de sabernos vivos con la posibilidad de cambiar el curso de nuestras vidas y el destino de la sociedad en que vivimos. Dentro de tu mente lo tienes todo, si buscas dentro de ella siempre encontrarás razones para ser feliz y también para permanecer en la tristeza, porque la felicidad no depende de lo que haces, ni tampoco de lo que tienes. No depende de cómo sea tu cuerpo, ni de que tengas más o menos dones, sólo depende de lo a gusto que estés con lo que haces, con lo que tienes, con tu cuerpo y con tus dones. La felicidad depende básicamente de que estés a gusto contigo mismo.
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Que Dios les dé una feliz semana, con abundantes bendiciones, salud y suficiente amor y alegría en el corazón para vivir cada día a plenitud.